A continuació reproduïm
gran part del cos de la notícia:
El presidente del Gobierno aragonés,
el socialista Marcelino Iglesias, está dispuesto
a que una ley convierta al catalán en lengua
cooficial en Aragón, por su supuesta presencia
en las comarcas que limitan con Cataluña. Retomaría
así las líneas que se apuntaron en las
Cortes de Aragón en 1997, en el dictamen aprobado
por una comisión que estudió la situación
lingüística de esta Comunidad autónoma,
en particular las comarcas de la Franja Oriental,
el territorio que limita con Cataluña en las
provincias de Huesca, Zaragoza y Teruel. El dictamen
de la comisión generó cierto grado de
consenso en las generalidades, salvo el voto particular
sobre ciertos detalles que planteó el PP, formación
que en el último año ha intensificado
sus críticas al PSOE aragonés por su
connivencia a las tesis nacionalistas de Maragall.
Además,
aquel dictamen era sólo la antesala, que después
se tiene que plasmar normativamente, y ahí
aparece el conflicto. En 1997 se indicó que
debía promoverse una ley de Lenguas de Aragón
que reconociera las variedades lingüísticas
propias -conocidas genéricamente como el "aragonés"-
y también el catalán. De por sí,
definir lo que se habla allí como catalán
genera rechazo entre quienes insisten que se trata
de una variedad lingüística propia, no
catalán. Y, en segundo lugar, abre la delicada
cuestión de "la territorialidad",
de posibles aspiraciones catalanistas sobre esa parte
de Aragón, dada la íntima fusión
entre lengua y territorio que hace el nacionalismo.
El proyecto de
ley se paralizó
Cuando, hace
seis años, apareció un borrador de lo
que podía ser esa ley saltó la polémica.
Colectivos sociales de la Franja contrarios a la catalanización
de este territorio recogieron varios miles de firmas
contra lo que consideraron que era un intento por
hacer del catalán una primera lengua en esas
comarcas aragonesas. Y, al final, los políticos
aragoneses dejaron el asunto paralizado.
Tras las elecciones de mayo de 1999,
el socialista Marcelino Iglesias ocupó la Presidencia
del Gobierno aragonés en coalición con
el PAR, que hasta entonces había sido aliado
del PP en el gobierno. Pasó la legislatura
1999-2003 sin que se hablara de la ley de Lenguas.
Pasaron las elecciones de mayo del año pasado,
Iglesias venció en las urnas y se repitió
gobierno de coalición. Es ahora cuando vuelve
a hablar de esa posible ley de lenguas que permanece
varada desde hace seis años. Lo ha hecho en
una revista en catalán editada en Aragón,
Temps de Franja, que recoge sensibilidades diversas,
desde los que se definen como aragoneses catalano-parlantes,
hasta las tesis separatistas de quienes defienden
abiertamente que esta zona de Aragón es parte
de los "Países Catalanes".
[...]
Sin embargo, desde la Federación
Aragonesa de Asociaciones Culturales del Aragón
Oriental (Facao), opuesta al catalanismo en estos
territorios, se cree que el hecho de que ahora se
retome la idea de la ley de Lenguas no es casual,
con Maragall al frente de la Generalitat. Iglesias
lleva meses de sintonía con el líder
de los socialistas catalanes y de comprensión
hacia sus ideas "macroterritoriales", con
Cataluña como centro de una nueva macroregión,
la antigua Corona de Aragón.El presidente de
la Federación de Asociaciones Culturales del
Aragón Oriental, Ángel Hernández,
insiste en declaraciones a ABC en que el trasfondo
del asunto "no es lingüístico sino
territorial", un medio para cumplir con las tesis
nacionalistas catalanas y con su idea de los "Países
Catalanes". Sería, a su juicio, allanar
más el terreno a las aspiraciones expansionistas
catalanas en un punto tan fundamental al nacionalismo
como es la lengua.
Desde otras asociaciones de la Franja,
entre ellas las que editan la propia revista Temps,
se presenta el asunto como estrictamente lingüístico
y cultural. Ellos afirman que allí se habla
catalán, un catalán con ciertas peculiaridades
propias a la zona. Y defienden que por eso ha de fomentarse
legalmente el uso de esa lengua en esta parte de Aragón.
Es una visión que no comparte la Facao, que
niega que en estas comarcas se hable catalán,
sino aragonés oriental, igual que rechazan
la genérica denominación de Franja y
defienden la de Aragón Oriental. La Facao acusa
a esos movimientos de defender, con más o menos
intensidad, los planteamientos del nacionalismo catalán
y, en algunos casos, tesis favorables a que este territorio
aragonés acabe siendo parte de Cataluña.
"Se abren las puertas a
la anexión"
El presidente de la Facao lleva años
de activismo contra lo que considera que es "la
progresiva colonización catalana de parte de
Aragón". Afirma que, en esa tarea, el
nacionalismo catalán cuenta con apoyos dentro
de Aragón y entre ellos incluye al propio presidente
de la Comunidad, Marcelino Iglesias. Hernández
destaca que CiU, durante su larga etapa de poder en
la Generalitat, ha financiado con generosidad a entidades,
actividades y grupos catalanistas en estas comarcas
aragonesas. Y ahora, afirma, le toma el relevo el
tripartito de Maragall y sus tesis compartidas con
el nacionalismo de izquierdas. Según Hernández,
si se declara cooficial el catalán en Aragón,
"se favorecerá, en esta parte de Aragón,
la construcción de lo que ellos llaman la Gran
Cataluña; la lengua será el caballo
de Troya, se abren las puertas a la anexión".